El jengibre fue una de las primeras especias que llagaron a Europa. Traída de Asia, se usaba como medicina y también como condimento.
El jengibre fresco es un condimento muy usado en la cocina oriental. Se pela, se corta en finas lonchas y se calienta en aceite para perfumarlo.
Para conservarlo, se puede guardar envuelto en papel de aluminio en la nevera donde dura hasta 3 semanas. Si lo conservamos en el congelador, nos puede durar hasta un año. Cuando vayamos a usarlo, se raya la cantidad que queramos usar, y se vuelve a guardar.
Otra opción es cortarlo en finas lonchas y guardarlas cubiertas de aceite de oliva en un tarro de cristal. Esta opción nos aguantará en la nevera más de un año.
lunes, 17 de febrero de 2014
Conservar el jengibre
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario